
Los Verdes europeos y Equo organizaban esta semana la conferencia Consumo de carne y cambio climático: un debate ineludible impulsada por nuestro eurodiputado Florent Marcellesi, en la que reunían a ecologistas, animalistas, ganaderos ecológicos y consumidores. Diversos sectores con diferentes intereses, especialmente en cuanto al trato a los animales y el bienestar de estos, pero con un enemigo común: el cambio climático.

La representante de Equo Animales, Paula Jarque, ahondaba en esta postura: “Nuestro objetivo es promover las dietas vegetarianas y veganas como paradigma de la lucha contra el cambio climático y el uso y abuso de los animales en la industria cárnica. Sin embargo comprendemos que este será un cambio progresivo que llevará un tiempo, educación, sensibilización y durante ese camino debemos velar por aquellos animales que forman parte de la cadena de consumo humano”.
A razón de esto, Jarque señalaba que “la única forma de ganadería” que podrían considerar en Equo es “la extensiva, local, ecológica, transhumante y de razas autóctonas”, que tiene un impacto menor sobre el ecosistema.
“Comer carne procesada se ha vuelto más asequible que comer frutas y verduras. Esto es una grave incongruencia porque la producción de carne requiere muchos más recursos que la producción de frutas, verdura y cereales”, aseguraba la representante animalista de Equo.
